jueves, 26 de febrero de 2015


RETRATO DE ALGUNA CIUDAD NUBLADA.

Llueve y hace sol,
viven las nubes y los claros
en las fuentes recónditas.

Comienzan los vientos
su jornada de 24 horas,
viven entre la ceniza edificada.

Ahora los semáforos 
cambian dóciles su color,
lloran  las grúas

pues nunca alcanzan el cielo. 

                                                                                  De: Salazar Iepes Ogontón.

1 comentario:

  1. Me ha encantado el cierre del poema: esa imagen tierna de las grúas buscando una altura habitable y lejana. Todos los ideales son mínimas nubes Gracias por el poema y un abrazo cordial desde Rivas.

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